¿Cuáles consideras que son tus grandes maestros en el baile?
Mis maestros en el baile, si hablamos del flamenco actual, como no Farruquito. Creo que Farruquito es la piedra angular del flamenco actual. O José Maya, también creo que es otra piedra angular. El Farru, El Barullo o Juan de Juan o Pepe Torres, El Torombo. Inclusive el maestro Mistela, por ejemplo, son referentes para nosotros. Luego del flamenco más antiguo pues El Güito. Como no el gran maestro Farruco que es la piedra super super angular del flamenco.
¿Crees que si no hubieras nacido en una familia de linaje artístico habrías sido, de igual manera, bailaor?
Puede ser, porque seguramente me hubiese gustado de la misma manera y me hubiese enamorado del flamenco. Pero claro, la influencia viene de que mi padre es cantaor y he vivido el flamenco muy cerca y de muy niño. Eso es lo que a mi me ha metido en este mundo del arte.
Siendo tu padre cantaor, ¿por qué tú te decantaste por el baile?
Es una pregunta difícil el por qué me decanté por el baile. Empezó como un juego en una clase que entré, como una diversión, y me acabé enganchando. Porque yo por genes nací con el don del cante, y de hecho canto, y soy muy aficionado, pero entré en una clase de baile por diversión y al final me acabé enamorando del mundo del baile.
Viéndote bailar en directo se percibe una potencia y un arrebato del que no muchos artistas pueden presumir, ¿cómo logras compaginar esta fuerza y la técnica requerida en el flamenco?
Yo personalmente soy un bailaor que se deja llevar por el momento por el corazón porque creo que mi manera de baile es de inspiración. Es la manera que sé bailar, es mi forma, yo no sé de otra forma. Hay bailaores que son fenómenos o que tienen el don de decir pues aquí voy a hacer esto o voy a hacer lo otro. Y como he dicho antes, a mí que me gusta mucho el cante y soy aficionado pues mi inspiración es el cante y siempre escucho y de la manera cómo me siento o percibo el cante, así bailo. Un día puede ser eufórico, otro día puede ser con más sentimiento de pena o de alegría, según siento mis emociones así bailo yo.
¿Qué gana y qué pierde un bailaor con el paso del tiempo, según se va haciendo más mayor?
Ganar por supuesto que gana la madurez, gana la sabiduría. El baile es mucho más maduro la forma de bailar. Quizás pierdes con los años porque la edad no pasa en balde porque esto es un ejercicio físico muy fuerte. Los bailaores son deportistas, en cierto modo, de élite. Pero bueno yo siempre lo digo siempre que me preguntan o entrevistan, soy de los que piensa que cuanto más creo que sé, más perdido me siento. Porque cada vez que se más, que me acerco más al flamenco, lo acabo viendo más grande. Nunca logro ver el fin o la magnitud del flamenco. Creo que el flamenco es infinito y no acaba nunca, y creo que el baile también.
¿Es especialmente exigente ser bailaor flamenco en Madrid por su alto nivel artístico?
Por supuesto, es muy exigente. En Madrid hay muy buenos artistas, en el mundo del flamenco hay muy buenos bailaores. Siempre uno intenta exigirse más a uno mismo porque hay una gran calidad y un alto nivel de flamenco en Madrid. Quizás últimamente estamos perdiendo la esencia del flamenco y estamos metiéndonos mucho más en el mundo de la danza. Yo cuando era más chiquitillo tuve la suerte de ver a los grandes maestros que guardaban esa esencia tan personal, y tan flamenca, y tan de verdad, que hoy en día se empieza a ver un poco menos ya que la juventud somos mucho más transgresores. Es bueno ser transgresor, pero sin olvidar las raíces y últimamente estamos olvidando las raíces. Si que es verdad que tenemos mucha más técnica y somos mucho más precisos, pero estamos perdiendo la esencia del flamenco, esa flamencura que había antes tan de verdad. Entonces es muy difícil en Madrid, en Andalucía o en cualquier parte de España tener un nivel, no de fenómeno, porque eso lo tienen muy pocos, los que están tocados por la varita; pero sí que estemos todos a un nivel que lo que hagamos lo podamos defender.
A veces, parece que el público extranjero tiene más interés por el flamenco que nosotros por nuestra propia cultura. ¿Cómo crees que se podría aumentar la curiosidad por el flamenco en España?
En España, por desgracia, la juventud ha olvidado sus raíces, ha olvidado de dónde viene. La música que lleva España por bandera y por excelencia. Porque siempre está relacionada con el arte marginal y el gitano. Es cierto que el flamenco es una creación del pueblo gitano, pero en España, en los años 40 ,50, 60, la gente era flamenca. Los abuelillos, la gente mayor que hay todavía en los pueblos, si le pides que te cante algo te va a cantar una copla, un fandango, un taranto… Porque es el flamenco la música por excelencia en España. Y a mí, que he tenido la suerte de viajar, cuando he salido a otros países, me preguntan cómo teniendo una música tan rica y tan bonita en España como es el flamenco, que rompe todas las barreras en el mundo entero, aquí nadie la tenga en cuenta ni en estima. Somos el único país, porque a cualquier otro país que vayas la música nacional eso es intocable, está defendido a capa y espada y se apoya. Aquí en España no. Esperemos que la juventud o que algún día esto cambie y la gente en España volvamos a ser flamencos. Volvamos a apoyar nuestra música, volvamos a apoyar a nuestros artistas flamencos que hay. Como he dicho antes, estos grandes bailaores. Farruquito que es una genialidad, para mi es el genio. José Maya que es otra genialidad en todos los aspectos. Esperemos que la juventud empiece a indagar en la música que escuchaban sus abuelos, que son nuestras raíces y de dónde venimos. Cuando la juventud empiece a indagar en eso, España volverá a ser flamenca.
