“Siroco nació en los últimos coletazos de La Movida, con más ilusión que recursos, como proyecto de unos amigos veinteañeros que querían dar continuidad a sus inquietudes”, inicia el relato David Novaes, cofundador de la sala. Miguel Calvete, el otro cofundador, detalla: “ante una economía limitada, [dos años antes de la apertura de Siroco] se nos presentó un local cuya localización nos encantó, con terraza y montamos el Rompeolas, junto al Viaducto, que supuso un éxito dentro todos esos años de la post-Movida, pero sobre todo un trampolín de experiencia empresarial, hostelera y admnistrativa”. Han pasado 33 años desde la apertura, un 15 de noviembre de 1989, de Siroco en la calle San Dimas, donde hoy, permanece abierta y más activa que nunca.
Miguel Calvete destaca de su progresión a lo largo de los años: “se fue convirtiendo y consolidando como un espacio de encuentro creativo donde paulatinamente cada año se fueron programando más conciertos y sesiones de noche, desde proyecciones especializadas a convocatorias multiculturales más vanguardistas”. Complementa David Novaes: “la programación ha ido diversificándose en estos 33 años, primero con una decidida y pionera apuesta por el clubbing y la escena de músicas electrónicas que empezó a fraguarse mediados de los años 2000 y luego, a mitad de la década del 2010, con la programación de las Fast Expos y el apoyo a los nuevos artistas gráficos”. “El espíritu de la sala y sus objetivos son prácticamente los mismos que en sus inicios, es decir el apoyo al talento emergente y a los colectivos y agentes culturales independientes y que tanto artistas como público se sientan como en su casa”, detalla. “Siroco se ha convertido paulatinamente en un caleidoscopio de encuentro cultural, donde desde su programación de conciertos, sesiones de clubbing en la noche y exposiciones graficas al final nos dan muestra en el día a día desde la propia sala del gran potencial artístico y el pulso de renovación creativa que siempre tendrá una gran ciudad como Madrid” así lo define Miguel.
“Podemos decir que lo celebraremos ampliando aún más la ilusión, junto con la gran familia de amigos del sector musical y clientes habituales de la sala, sabiendo que es un año más para un ‘clásico siempre joven’ como es Siroco”, nos cuenta Miguel Calvete. “Desde el año 2015, hemos sumado a nuestra tradicional fiesta de aniversario la celebración de los Premios Siroco que ya van por su VII edición y que buscan visibilizar a los actores de la escena musical y cultural más emergente e independiente. Esta convocatoria que se celebra en Siroco el próximo martes 15 de noviembre, aunque dirigida principalmente a estos colectivos, está abierta al público más general y a todos los amantes de la programación de Siroco. En el transcurso del aniversario entregaremos los Premios Siroco, tocará la adictiva banda Pablo Galiano & The Sirocos que nos sacudirá con unos cuantos clásicos y del After-party se encargará DJ Page”, explica David.
A pesar de todas las dificultades acontecidas recientemente, David Novaes afirma que para ellos el futuro es sobre todo un reto apasionante: “tras 33 años de vida donde hemos tenido que afrontar todo tipo de retos para asegurar la continuidad del proyecto y tras haber superado recientemente una durísima pandemia, podemos afirmar que no nos asusta el futuro. Una sala como Siroco tiene, por un lado, que evolucionar a la par que evoluciona la escena artística y seguir estando en contacto continuo con ella para nunca perder su pulso”. En la misma línea, Miguel Calvete asegura que la clave de mantener ese pulso pasa por la profesionalidad de su equipo: “lo más importante del éxito de Siroco siempre ha sido el contar en todos estos años con un equipo unido y profesional que han cuidado con celo y atentos para que el futuro de la sala sea el mejor que pueda dar de sí misma y donde el público se siga sintiendo como en su casa. ¡La música continúa!”.
Miguel Calvete: “podríamos compartir muchas anécdotas, pero destaco una simpática y también aleccionadora para todos dentro de la vocación que siempre ha tenido y tendrá Siroco como sala canterana que ha mantenido su compromiso de apoyo y cercanía con todos los grupos emergentes, sin olvidarse de los grupos ya consolidados: en la presentación del primer disco de Los Rodríguez, donde como ya dijo el propio Ariel Rot: ‘La gente fue a vernos como diciendo: ‘a ver qué hacen los ex-Tequila’’. En ese ambiente, el presidente de una compañía discográfica que acudió ese día nos preguntó desde la incredulidad –estando todavía tocando el grupo sobre el escenario- que cómo programábamos un grupo de componentes ya tan mayores, y a su juicio de entonces, lo que sería una propuesta más sin futuro. Y, justo al año de esta presentación de su primer disco, Los Rodríguez, en su meteórico ascenso, terminaron organizando un concierto en la Plaza de las Ventas, donde -según salieron al escenario- se inmortalizo esa famosa frase de: ‘Los Rodríguez, ¡de Siroco a las Ventas!‘. Bien resume que la creatividad y el éxito de cualquier grupo que pasa a diario por todas las salas de conciertos, en verdad, debe de estar por encima de cualquier prejuicio que alguien pueda proyectar sobre ellos, aunque fuese una de las personas que más sabían y más poder tenía dentro de la escena musical en ese momento (y siendo por supuesto un gran profesional, del que desde el cariño no diremos el nombre, pues eso no aporta para el valioso aprendizaje de esta anécdota que sucedió en Siroco). Es una lección para todos”.
