Su voz atrapa a la primera escucha. Desirée Diouf, hija de senegalés e italiana, se ve a sí misma en el espejo de las grandes voces negras de la historia: Aretha Franklin, Billie Holiday, Etta James, Nina Simone o Tina Turner. Su música es un reflejo de todo ello: soul, jazz, funk y reggae con un toque afrobeat. Desirée Diouf hace su presentación dentro del ciclo con su proyecto más viajado, Sugar Drops, fundiendo groove del soul y el funk en una música para bailar y enamorar.