Nacidos a partir del cese de actividad de un grupo anterior llamado Ramsay, los pamplonicas Ardi Beltza se asoman a la escena del metal con su primer disco, llamado como el grupo, tras tres años de trabajo en la soledad del local de ensayo. En consecuencia, este disco muestra toda la rabia y la crudeza acumulada desde 2014 en una banda que hace del thrash metal su bandera, con rabia y contundencia, tanto en sus letras como en las agresivas melodías y en las rabiosas voces, formando todo ello un bloque compacto.