Las versiones forman una parte muy importante de tu carrera. ¿Qué papel jugaron en tus inicios y cuándo decidiste lanzarte a hacer tus propias canciones?
Las versiones siempre fueron la forma más fácil de cantar, de transmitir mensajes con los que resonaba y de empezar a conocer y a disfrutar con mi voz. También aprendí a acompañarme con instrumentos y así fue como la gente empezó a saber que cantaba. Además empecé haciendo versiones en inglés porque me resultaba una barrera a la hora de comunicarme, los mensajes de las canciones quedaban más abstractos y de alguna forma no se entendía de manera natural lo que estaba contando. Pero fue a raíz de una experiencia personal intensa que empecé a escribir en forma prácticamente de poesía, y gracias al consejo de mi mejor amigo empecé a ponerlo sobre acordes y a darle forma de canción, y así empecé a contar mis historias.
Tu música tiene un estilo muy llamativo que mezcla elementos del pop con un sentido muy bailable. ¿Cómo describirías tu sonido y qué influencias consideras más importantes en tu evolución artística?
Creo que el sonido y estilo como tal de cada canción lo determina el mensaje que estoy transmitiendo en ella y lo que pide la letra, por eso hay temas tan diferentes y que marcan etapas tan marcadas en mi trayectoria. También mis referencias han ido cambiando a lo largo de los años, y se han visto reflejadas en mis trabajos. Por ejemplo en mis inicios mis influencias era el mundo canción de autor (Andrés Suárez, Funambulista, Zahara) y de ahí nació “Deshielo”. Tiempo después entré en contacto con sonidos más electrónicos e indagué a Natalia Lacunza, Belén Aguilera, C Tangana, Alizzz y demás; y se refleja en trabajos posteriores. Ahora mismo escucho mucho Carlos Ares, Taylor Swift y Leiva, por ejemplo; ya no sé qué saldrá de ahí.
El 6 de marzo vas a estar actuando en Cadavra. ¿Qué significa para ti este concierto en particular y cómo te preparas para enfrentarte al escenario?
Madrid es una ciudad que me hace especial ilusión, es un sitio que me fascina y que disfruto mucho cada vez que voy allí a trabajar y a hacer música, o a reunirme con mi equipo. Por eso ir ahora a actuar en directo me parece otro tipo de viaje que me apetece mucho hacer. Además en formato sala, que estoy descubriendo que es un ambiente en el que me muevo de una forma muy intuitiva y natural, más relajado que en festivales y mostrando una faceta muy mía que atraviesa todas esas etapas que mencionaba. Me hace mucha ilusión.
¿De qué manera percibes que ha evolucionado tu forma de componer y de grabar las canciones en estos años?
Cuando empecé escribía de una forma muy poética y literaria, porque era lo que escuchaba y de lo que me alimentaba. Pero con el tiempo el cuerpo me ha ido pidiendo transmitir de manera más directa, representar las emociones que canto tal cual las siento y pienso, y creo que eso ha ido consiguiendo que la gente conecte aún más fácil con mis mensajes, que siempre he sentido que es lo principal de mi música, el mensaje.
¿Cómo te impulsa haber sido uno de los proyectos seleccionados del ciclo AIEnRutaArtistas?
Me parece todo un regalo, además siento que me ha venido en el momento perfecto de mi carrera, ni antes ni después, era ahora. Poder recorrer diferentes salas del país y estrenar este formato de sala es toda una experiencia que estoy disfrutando mucho, compartiendo carteles con bandas que suenan increíble y descubriendo muchas otras que también me están sorprendiendo.
¿Cuáles son los desafíos más grandes que has enfrentado como artista emergente y cómo los has superado?
Supongo que recibir los “no” de vez en cuando; abarcar demasiados ámbitos yo sola y exigiéndome estar a un nivel siempre superior. Intento superarlos centrándome en hacer buenas canciones, porque al final es lo que está en mi mano y todo lo demás a veces nos acaba robando un tiempo muy valioso. Siempre teniendo fe en mi proyecto, en lo que hago y en lo genuino de mis canciones.
¿Tienes alguna canción que, para ti, sea la más especial de todas las que has creado hasta ahora? Si es así, ¿por qué es esa canción en particular la que más te define?
Tengo alguna de cada etapa, por ejemplo de mi primer álbum me flipa “Fría sentencia”, creo que es una canción que cala muy hondo desde el primer momento y que fue escrita en un momento muy difícil para mí y que por eso es tan real y tan minimalista. De las etapas siguientes mis favoritas son “Tan fácil” por la fuerza que tiene, lo pegadizo del estribillo y por todo lo que he disfrutado cantándola en directo, la gente que viene enseguida se engancha a la canción (la conozca o no) y eso me parece mágico. Ambas definen dos facetas mía que conviven muy bien: la cantautora y la más electrónica.
El pop en España ha evolucionado mucho en los últimos años. ¿Cómo crees que tu música se conecta con las tendencias actuales?
Siempre he sentido mi música dentro del pop, ya el adjetivo que se le añada ha dependido de mis etapas y mi momento vital; con su propia evolución intrínseca. En las tendencias actuales siento que ahora mismo estoy trabajando dentro un pop más nostálgico e íntimo, dentro de programaciones electrónicas y manteniendo un equilibro entre lo digital y analógico, me gusta trabajar esa búsqueda.
¿Cuáles son tus próximos proyectos o metas a largo plazo en la música? ¿Hay algo nuevo que los fans puedan esperar próximamente?
Me encuentro trabajando en mi siguiente álbum, le estoy poniendo mucho cariño y a través de él estoy haciendo un trabajo muy profundo a nivel personal de buscar exactamente lo que me gusta y lo que me hace mostrar mi autenticidad, lejos de etiquetas o de intentar parecerme a nada, simplemente sacar lo que llevo dentro y que la gente conecte con ello. Así que mejor estar atentos porque enseguida se podrán empezar a escuchar cosas nuevas y me muero de ganas.
