Guillermo McGill vuelve al Central para presentar un proyecto nuevo que se resuelve en formato de quinteto instrumental. En él, todos sus componentes profundizan en el camino de Jazz-ECM-Flamenco que hace algunos años se trazó el artista con composiciones en las que las estructuras, el orden de temas y el desarrollo de las melodías encuentran fundamento, en la medida que se puede, en la distribución de energías entre los músicos y en la que éstos le reservan al público.
Estos son, básicamente, los ejes argumentales que han servido para poner en funcionamiento una iniciativa, que, al igual que muchas en las que se ha visto involucrado Guillermo, es flamenco liberado y también es jazz con apellido que mira hacia la tierra.