A sus 25 años, Stephen Please es uno de los nombres imprescindibles de la emergente escena indie pop patria, que no deja de crecer, y en la que se respira un buen rollo y un sentido de hermandad poco habitual, y en la que encuentras proyectos tan diversos como los de Rebe, Daniel Daniel, Cariño o Chavales.
Por eso no sorprende que en Axolotes Mexicanos, una de sus bandas, esté también Confeti de odio. O que ocasionalmente colabore con Putochinomaricón. O que recientemente Chico Blanco, otro referente queer destacable de su generación, se ofreciera, vía Instagram, para remezclar una de las canciones de su primer EP, MMXVII. (Revista Shangay)