Isabel López, bailaora sevillana sin ascendencia flamenca, se lanzó al mundo del baile a los 7 años de edad de la mano del maestro Manolo Marín, llegando a formar parte de su compañía en el espectáculo ‘A Contratiempo’. Participó en la Expo’92 de Sevilla; trabajó en el tablao de Tokio El Flamenco junto a Domingo Ortega; actuó en el Festival Internacional de Teatro de Bosnia; alternó durante un tiempo en Madrid actuaciones en El Café de Chinitas, Los Gallos, El Arenal, Casa Carmen… con clases en los estudios de Amor de Dios. Maneja la bata y el mantón con mucha habilidad, destreza y elegancia. Es una profesional muy completa además de reflejar en sus bailes el peso de la responsabilidad que le exige su profesión.