Antonio de la Cuesta nació en Burgos, pero ha vivido casi toda su vida en Pamplona. Al principio de los ochenta era Toñín, miembro de Tijuana in Blue, una banda de punk-rock con álbumes combativos que podían ser perfectos para bautizar a cualquier B-52: “A bocajarro”, “¡Sopla, sopla!” y “Te apellidas fiambre”. Después de Tijuana in Blue, forma parte de Kojón Prieto y Los Huajolotes, donde se dedicó a componer. Creó uno de los más sonados legatos antimilitaristas, una canción llamada “Insumisión”, y por ser consecuente con ella, es decir, por declararse insumiso, fue a parar a la cárcel. Al salir, viaja a Italia donde se empapa del acento y las costumbres. A su regreso se instala en Barcelona con muchas ideas para grabar un disco. Manu Chao produce “Me cago en el amor”, el primer single de Mondo Difficile, en su estudio clandestino de Barcelona. Mondo Difficile forma parte del imaginario popular italiano: Tonino actuó el verano del 2001 con una orquesta de 50 músicos en la Plaza del Duomo de Milán, ante 70.000 personas. Tonino Carotone es un divo consumado, al estilo de Adriano Calentano, que canta con ironía a todas esas cosas que incomodan a la gente nice: el alcohol, el pecado, y las mujeres. En CAFÉ LA PALMA hacía tiempo que le seguíamos los pasos y por fin, para nuestro XXIV Aniversario, podremos contar con nuestro eterno candidato a Chico Martini.
