A principios de siglo formó su primera banda junto Andrés Cabanes Manderley, presentados por Manuel Cabezali (Havalina). Ana Franco fue una de las precursoras del indie-folk en España. A los pocos años Andrés dejó de tocar y Ana siguió componiendo sola bajo el nombre de Coffee & Wine pero siempre acompañada por grandes músicos y amigos.
¿Cuál es el reto profesional que más te ha costado conseguir?
“Trabajar en proyectos en los que puedo desarrollar varios perfiles que me apasionan: música, sonido y mediación cultural. Vivimos en un mundo en el que la especialización se valora tanto que a veces nos vemos obligadas a abandonar disciplinas que nos gustan para dedicarnos en cuerpo y alma a una sola de ellas. Conseguir desarrollarte profesionalmente en áreas diferentes encontrando lugares comunes es costoso, pero se puede hacer”.
¿Ser mujer ha sido perjudicial o beneficioso para lograr ese reto?
“A veces perjudicial y a veces beneficioso, cuando lo ideal sería que no fuese ni una cosa ni la otra”
¿Existe alguna diferencia a la hora de expresarte artísticamente por tu condición femenina?
“Cuando escribo hablo de historias, muchas de mujeres, o de mi propia vida como mujer, del paso del tiempo, el amor, mi relación con la naturaleza…. Supongo que con esto se puede concluir que el hecho de ser mujer condiciona mi obra.
Julie, por ejemplo, es una canción de Coffee & Wine que habla del paso del tiempo para las mujeres mujeres músicos, porque es maravilloso que ahora se hable mucho más de bandas femeninas, pero aún queda por abrir el melón de qué pasa cuando las artistas como músicos, bailarinas, actrices, etc. van cumpliendo años, cambiando sus experiencias, teniendo hijos e hijas, etc”.
¿Crees que las mujeres deben mostrar mayor profesionalidad y calidad al ser juzgadas en este sector por su representación numérica menor?
“En el caso de la cultura no creo que sea una cuestión de números sino de algo socialmente aprendido. Afortunadamente, ahora lo notamos menos, pero las mujeres, por el hecho de serlo, a veces hemos sido juzgadas bajo criterios en los que los hombres no han entrado (o si lo han hecho, ha sido en menor grado.) Por ello es probable que hayamos tenido que esforzarnos más para ser no solo visibles, sino sobre todo valoradas bajo el mismo paraguas que los hombres”.
¿Crees que es necesario y se hace suficiente por visibilizar el trabajo femenino en la industria musical?
“Es muy necesario pero aún falta considerarlo como una carrera de fondo y no solo de forma. Hay muchas mujeres en la industria musical pero pocas ocupan cargos directivos, hay muchas directoras de cine pero casi ninguna candidata a un premio Oscar, hay muchas mujeres músicos pero muy pocos festivales con mayoría femenina o paridad en sus carteles. Estamos presenciando cómo en museos de todo el mundo se están empezando a dar cuenta ¡ahora! de que muchos cuadros hechos por mujeres siguen siendo hoy atribuidos a hombres. Si esto pasa en el Museo de El Prado, qué no pasará en la música popular. De esto se deduce que la visibilización de las mujeres en todos los ámbitos de la sociedad es algo clave.
Por otro lado, está muy bien que marzo sea el mes de la mujer y que se visibilicen nuestros trabajos, pero al llegar abril, en serio, no desaparecemos de la faz de la tierra 🙂”
Coffee & Wine es una de las 3 artistas seleccionadas en nuestra 1º Muestra de Nuevos Talentos Femeninos del Festival Mujeres en Vivo actúa el próximo domingo 28 de marzo en la sala Vesta junto a las otras dos seleccionadas Gaudea y Vosotras Veréis.
Si quieres conocer a otras artistas que participan en el festival Mujeres en Vivo 2021 pincha aquí.