Son uno de los engranajes indispensables de la industria musical en Madrid. Han dado lo mejor de sí mismas adquiriendo un grado de profesionalidad magistral. Han sido pioneras en muchas cosas, se han echado sobre los hombros la responsabilidad de un negocio duro y en muchos casos sin horarios, han creado y dado trabajo donde no lo había, han dado rienda suelta a sus pasiones, han cumplido sueños y ahora son la primera línea con responsabilidad en la cultura de Madrid.
Propietaria, La Riviera
La Riviera
La Riviera es la sala más grande de nuestra asociación y la de más aforo de Madrid. Cuenta con más de 50 años de historia desde que Jorge Negrete inaugurara este icono de la noche madrileña. Amparo, mujer fuerte y segura, se hizo con las riendas hace 6 años tras el fallecimiento de su marido, Eulogio Navalpotro, cuya pasión era la sala, y ella ha querido mantener esa pasión en marcha con todas sus energías.
“Los retos se afrontan día a día, mañana a mañana, luchando mucho, con un equipo detrás de mi impresionante, y bueno… con mucha suerte haciendo frente a la noche de Madrid. En esta sala todo se vive con mucha positividad”.
¿Cuánta gente depende de ti y que aprecias de ellas?
“Depende muchísima gente. De personal puedo tener entre 50 y 60 personas dependiendo del día… de ellos me llega respeto, sobre todo muchísimo respeto. Apoyan las decisiones que tomo, y teniendo en cuenta que soy la única mujer del equipo, me cuidan mucho”
¿Has cumplido algún sueño?
“He cumplido muchos sueños. Llevo muchos años al frente de esta sala y he cumplido muchos sueños. Por mis manos ha pasado todo tipo de público, de gente y de artistas. Uno grupo que me hizo mucha ilusión conocer fue Sidecar, es un gran reto, un buen futuro le espera a Sidecar”
Propietaria, Corral de la Morería
Corral de la Morería
Blanca es ante todo una madre, una bailaora, esposa y además empresaria. Su trayectoria es parte de la historia de la danza en el mundo. En 1986 fue nombrada representante de la Danza Española en la antigua Comunidad Económica Europea. Bailarina autodidacta, se casó con el propietario del Corral de la Morería, inició estudios de historia del arte y al enviudar, y con la ayuda de sus hijos, se echó el negocio a las espaldas.
Eres una mujer hecha a ti misma. Lo demuestras en tu biografía. Bailaora, empresaria ¿Cómo has asimilado esa vida tan intensa unida al flamenco?
“El amor a lo que haces tiene muchos caminos y cuando realmente quieres que lo que tú haces deje una seña y siga un camino en sinergia con otros artistas, solo hay una forma de hacerlo, por amor, por amor al flamenco, que representa a España, que es el país con más estilos de danzas del mundo”.
Mantener una marca como El Corral de la Morería es un trabajo intenso. El tablao no solo tiene calidad artística en la programación, sino que lo compagina con la gastronomía y lo acredita la estrella Michelin de vuestro restaurante. ¿Cómo lo hacéis?
“Además de la estrella Michelin tenemos otros muchos reconocimientos…
Se hace con un equipo maravilloso. Fundamental el equipo humano. Tengo dos hijos que son mi verdadero éxito en la vida. Están muy preparados y saben bien lo que es El Corral de la Morería porque lo han respirado desde niños y les mueve el deseo de crear.”
Esta es una pregunta doble. ¿Crees que tus esfuerzos han sido reconocidos? ¿Has cumplido sueños en el Corral?
“En el Corral todos mis esfuerzos se han visto reconocidos, nunca creí que iba a cumplir tantos sueños. El trabajo de mis hijos y el esfuerzo que han hecho, es la esencia del Corral de la Morería y es lo más grande que me ha dado la vida.”
Gerente y programadora Wurlitzer Ballroom
Wurlitzer Ballroom
Seguro que más de uno de los que está leyendo estas líneas ha acabado a ciertas horas noctámbulas o se ha empapado de un concierto con alto voltaje en el Wurlitzer Ballroom. Helena es uno de los fundamentales, como se dice, en economía de la sala. No tiene pelos en la lengua y reconoce que su trabajo es una obligación, pero que le encanta y es divertido.
¿Estás en esto por afición o por obligación?
“¿Qué tipo de pregunta es esta? Salvo los millonarios en general la gente no trabaja por afición, y mi caso no es distinto. Hay que trabajar en algo y al final he acabado aquí. Por supuesto he acabado aquí porque me gusta, mil veces más que otras cosas y porque es un sector al que soy aficionada. Pero no trabajo por amor al arte, ni en mi tiempo libre ni por salir de casa, me dedico a esto profesionalmente, así que obviamente es una obligación, que me encanta”
¿Es dura la carga de tanta responsabilidad en el trabajo?
“Dura no creo que sea la palabra, hay responsabilidad, hay estrés… como en cualquier trabajo en el que mucha gente depende de ti. Pero vamos tampoco es cirugía cardiovascular, ni estar en la mina, hay muchos trabajos con más responsabilidad y más duros. Este es un trabajo divertido y desde luego muy gratificante y yo siempre he llevado bien la responsabilidad y la presión”.
¿Crees que se valora el trabajo que haces?
“Sí, mucho. Mis socios, y todo el equipo de Wurli son fabulosos, sin el apoyo y el esfuerzo conjunto de todos, el Wurli o la Wurli no sería lo que es”
¿Se puede llegar a tener una rutina en un oficio tan libre de horarios?
“Por supuesto, de hecho, el no tener horario, a veces es una gran ventaja para conciliar, por ejemplo. Al final, no tener horario también significa que escoges que horario tienes; todo es cuestión de priorizar y organizarse”
¿Has conocido a tus artistas favoritos?
“Pues a unos sí, y a otros no, con algunos no pierdo la esperanza y otros se me han pasado las ganas. Es lo que tiene verlo desde detrás
Gestora, Costello Club
Costello Club
Hay personas a las que la música les supone un cambio en su vida laboral y en este caso es para bien. Costello es ya un referente del pop rock en Madrid, pero sin una buena gestión burocrática no habría como se dice “ni tu tía”. Realiza un trabajo ignorado en muchos casos por los creativos pero esencial para ser una empresa.
Estás en esto por afición o por obligación
“Yo vengo del mundo jurídico y comencé mi vida profesional con el ejercicio de la abogacía. Paco y Dani Marín, dueños del grupo Costello, eran clientes y amigos, y finalmente he terminado trabajando en exclusiva para ellos. Para mí fue un cambio muy importante y enriquecedor; pasé de un trabajo totalmente encorsetado, sujeto a horarios, etc. a trabajar en un sector mucho menos estricto, de manera más independiente, en un ambiente impregnado de creatividad y cultura.
Evidentemente trabajo para vivir, pero soy muy consciente de que es un lujo ir cada día a trabajar con ganas y con expectación, y esto me lo ofrece Costello Club”.
¿Es dura la carga de tanta responsabilidad en el trabajo?
“Asumir responsabilidades es esencial para crecer en todos los ámbitos de la vida, y en el profesional también. Mi puesto me ofrece la posibilidad de participar en todas las fases de cada proyecto que inicia el grupo Costello, desde que se empieza a elaborar hasta su culminación, con sus momentos difíciles, de dudas y en los que en ocasiones hay que tomar decisiones complicadas, pero con muchos momentos muy ilusionantes. Personalmente me resulta muy satisfactorio”.
¿Crees que se valora el trabajo que haces?
“En un sector tan creativo como este, se aprecia en todo trabajo de carácter administrativo una dicotomía; por un lado, se considera monótono y aburrido, pero por otro lado es absolutamente necesario, y la mayoría de las personas que trabajan en la música no tienen formación en el ámbito jurídico-administrativo (contratos, fiscalidad, RRHH…), es más, todo esto les suele “dar alergia.
Paco y Dani valoran mucho mi trabajo, en ocasiones no saben exactamente a que me dedico, pero aprecian no tener que ocuparse de este tipo de tareas, lo que les permite ocuparse de toda la parte creativa y de coordinación y les da la tranquilidad y seguridad que necesitan para el desarrollo de sus negocios”.
¿Se puede llegar a tener una rutina en un oficio tan libre de horarios?
“Yo aprecio mucho la libertad de horarios. Mi trabajo en el grupo Costello me ha permitido siempre conciliar mi vida personal y la profesional. Cuando empecé a trabajar aquí, hace casi 15 años, mis hijos eran muy pequeños y siempre he podido disponer de tiempo para ellos. Y ahora que han crecido podemos ir juntos a conciertos y festivales.
Siempre es una ventaja no tener que asistir a un lugar de trabajo concreto en un horario estricto. El poder teletrabajar y organizar tu tiempo y la forma de trabajo ajustándola a las necesidades tanto personales como de la empresa, favorece tanto al trabajador como al desarrollo del propio trabajo, siempre que haya unos mínimos de responsabilidad y compromiso”.
¿Has conocido a tus artistas favoritos?
“No soy muy mitómana, pero si he podido conocer a artistas que me gustan. Y sobre todo he tenido la oportunidad de conocer a artistas cuando estaban comenzando su carrera y seguir su desarrollo”.
Gerente, programadora y Dj Fotomatón
Fotomatón
Se puede tener pasión en la vida, pero hacer de ello tu modo de vida es pura vocación. Sandra está implicada hasta los huesos en lo que hace. Llevar Fotomatón es su forma de plasmar su modo de vida, aunque obliga, a veces, a realizar tareas que no son tan glamorosas.
¿Estás en esto por afición o por obligación?
“Por afición. La música es mi mayor pasión, y cuando salió la oportunidad de recoger el testigo del Fotomatón, aunque me daba mucho miedo, decidí liarme la manta a la cabeza e intentarlo. Suelo preferir arrepentirme de hacer algo que preguntarme el resto de mi vida qué habría pasado si lo hubiera hecho.”
¿Es dura la carga de tanta responsabilidad en el trabajo?
“Si, muy dura. Yo soy arquitecta, por lo que lo de ser autónoma no me pillaba de nuevas. ¡Pero esto es otra liga! Muchísima responsabilidad y muchísimas cosas a tener en cuenta, en las que antes jamás hubiera pensado. Aunque también es verdad que hay momentos en los que disfrutas mucho y te lo pasas muy bie.n”
¿Crees que se valora el trabajo que haces?
“Si y no. La gente suele decirme: “Jo, ¡me encanta la programación de este mes!” o “El otro día nos lo pasamos súper bien, ¡qué guay! ¡Gracias!”, pero desde fuera no se ve, ni se imagina, todo el trabajo que implica llevar una sala. En mi caso, además, como es pequeñita, hago absolutamente de todo… ¡hasta limpiar! Y eso que lo odio, jaja. Y aún así siempre crees que podrías hacer más cosas… ¡la lista de tareas pendientes es interminable! Tanto que a veces prefieres dejar de pensar y de tener, o que te den, ideas nuevas.”
¿Se puede llegar a tener una rutina en un oficio tan libre de horarios?
“Si y no de nuevo. Yo me esfuerzo por llevar unos horarios “normales” entre semana: levantarme pronto, hacer el “trabajo de oficina” de día y desconectar a una hora prudente. Pero al final en cualquier momento puede surgir “trabajo”, tanto llamadas, mensajes, problemas o imprevistos que tienes que atender, como que estés disfrutando de tu tiempo libre y conozcas a un artista que quieres que venga a tocar o a una persona que quiere organizar una fiesta. Puedes desconectar, pero sigue siendo tu sala 24×7. Se transforma en algo intrínseco a tu vida y tu persona”.
¿Has conocido a tus artistas favoritos?
“Pues reconozco que, a unos cuantos, ¡si! Alguna vez hasta me he puesto nerviosa y me ha dado vergüenza hablar con ellos. Aunque la mayoría son tan majos y accesibles que eso pasa pronto”.
Camarera, Rock Palace
Rock Palace
Se define como un animal nocturno. Por eso trabajar en un lugar por el que transitan músicos de todo tipo, son locales de ensayo también, la hace una espectadora privilegiada. Baila Burlesque en la Evil Eva Burlesque School y además da clases de batería con Fernando Lamas. Virginia es una de las caras que puedes ver en el Rock Palace.
¿Estás en esto por afición o por obligación?
“Más por vocación, siempre fui un animal nocturno y mi pasión es la música. La obligación es pagar las facturas cada mes”
¿Es dura la carga de tanta responsabilidad en el trabajo?
“He trabajado en distintos sectores y todos los trabajos tienen su dureza, la noche algo más, pero somos un gran equipo, una familia más bien. Se reparten las responsabilidades entre todos”.
¿Crees que se valora el trabajo que haces?
“Sí mucho, me lo repiten todos los días, afortunadamente”.
¿Se puede llegar a tener una rutina en un oficio tan libre de horarios?
“Fuera del bar, en mi caso sí porque mis días libres son los mismos cada semana. Tenemos la suerte de que en Madrid hay actividades culturales a diario, es cuestión de organizarse. Yo bailo burlesque los martes y recibo clases de batería los miércoles.
Dentro del bar lo único rutinario es la repetición de horarios, pero por suerte, cada noche es distinta”.
¿Has conocido a tus artistas favoritos?
“Sí a muchos!! Desde los que ensayan en nuestros locales habitualmente como Trogloditas, La Frontera, Enemigos, Border Caballero, Toreros Muertos, Estrella Morente, Parquesvr… Hasta los que pasan por el escenario cada noche como Al Dual, Lucky Dados, Los Twangs, Jenny Woo, Los Saxos del Averno, Malabrava, The Ragtones, Juanita Banana, Hypocondriacs, y un larguísimo etcétera”.
Directora de Comunicación y Programación – Siroco Lounge
Siroco Lounge
Sara lleva desde que casi tiene uso de razón moviéndose por el ambiente maquetero y más independiente. Doce años de trabajo que le han llevado a tener un empleo y de responsabilidad en una de las salas más emblemáticas de Madrid, Siroco.
¿Estás en esto por afición o por obligación?
“Tengo la gran suerte que mi afición llevando a grupos maqueteros y organizando conciertos hace doce años, acabó convirtiéndose en mi trabajo, y hasta ahora sigo encantada trabajando y ligada al mundo de la música”.
¿Es dura la carga de tanta responsabilidad en el trabajo?
“Bueno no lo veo tanto como una carga, se cual es mi trabajo y yo misma soy la primera que me exijo que las cosas salgan bien, así que creo que forma parte del día a día”.
¿Crees que se valora el trabajo que haces?
“Espero que sí! jaja. Siempre es bonito cuando recibes un buen feedback de un artista o compañero”.
¿Se puede llegar a tener una rutina en un oficio tan libre de horarios?
“Yo concretamente tengo horarios y por supuesto rutina, aparte de que me considero bastante ordenada, soy Virgo, jaja, y práctica para organizarme todo el trabajo. Con tal cantidad de contenidos que manejamos vería imposible hacerlo de otra forma y que saliera bien”.
¿Has conocido a tus artistas favoritos?
“Sí, en todos estos años he conocido a artistas que admiro, tanto dentro de las salas en las que he trabajado (Costello, Siroco, La Palma…) como en mi tiempo de promotora de conciertos, así como de fotógrafa”.
Fotografía: Wilma Lorenzo
Video: David Palazón
Comunicación: César Merino. María Dávila
Producción: María Dávila. Natalia Alaminos
Coordinación: Elena Mozo
Dirección: Javier Olmedo